Decisiones

Equivocarse es normal, pero no es lo correcto. Tengo miedo, pero de eso se trata, no suelo utilizar el último día del año para hablar de estas cosas, pero da la casualidad de que el destino jugo con el tiempo y lo ajustó para que pudiera tomar las decisiones necesarias y comenzar una nueva etapa en mi vida y lo digo porque hace dos días hice algo asqueroso, algo de lo que ya no quiero ni hablar y no porque quiera hacer como si no pasó si no porque tome mi decisión, y la mantendré sin tener la necesidad de recordar dicho suceso. Pero si me pongo a contarles todo lo que hice durante el año... déjenme resumirlo en unos cuantos párrafos más.

Este 2017 cumplí varias metas, hice y aprendí cosas nuevas que ni imaginé, cosas que ahora están guardadas tanto en mi mente como en mi corazón y agradezco a la vida por ello. Este año para mi fue corto, y aunque comenzó con el fallecimiento de mi tío, seguido de que estuvo hospitalizada toda mi familia.. no fue tan malo como otros piensan.

Inhale por primera vez bombas lacrimogenas, corrí como nunca en mi vida para no salir perdigonada en el intento, tranqué calles, me gano la impotencia; sentí esa adrenalina que solo sentía de niña cuando jugaba counter-strike o cuando mis compañeros de primaria intentaban quitarme el balón cuando yo queria hacer el gol.

Logré comenzar mis estudios en la universidad que quería, lamentablemente no fue lo que esperaba y tampoco di lo suficiente de mi, pero me di cuenta de que si puedo lograr lo que me proponga sin la ayuda de quienes creí necesaria, pero claro, siempre y cuando haga las cosas correctamente y con bastante paciencia.

Hice mis primeras sesiones fotográficas y así como admiré atardeceres a la orilla de la playa.. admiré una hermosa mirada y, como siempre, me senté y me detuve y admiré esos hermosos detalles que tiene la vida en medio de tanto caos.

Conocí personas que realmente valen la pena, así como también conocí personas que valen todo lo contrario. Las personas que me conocen saben que no me arrepiento de la mayoría de las cosas que hago y mucho menos de las que digo, en realidad soy una persona muy segura a la hora de decir lo que siento en dichos momentos. De hecho, hay personas que no conocen de mi y optan por mantenerse "seguras" en una idea equivocada de quien soy. Supongo que más adelante se darán cuenta.

Me deje confundir por un montón de pensamientos que al final lo único que me hicieron fue caer y malgastar tiempo o quizá no, aún no lo se. Pero ¡eso no es malo!... arregle una parte de mis problemas familiares y eso es bueno en una gran parte. 

En el amor... no hay mucho que comentar. Creo que este año si experimente un poco el amor. Sentí por primera vez nervios al sostener unas manos. Sentí lo hermoso que es quedarse dormida tomada de la mano de esa persona especial. Supe que se siente despertar y tener a esa persona a tu lado. Sí, conocí a alguien, pero hice las cosas mal. Recién decidí que antes de entregarme a alguien tengo que hacerlo bien y ser real y en estos momentos necesito ser real conmigo misma y no dejar que las cosas se me vuelvan a salir de las manos. Primero pretendo mostrarme a mi misma como soy -conocerme- para luego entregar mi alma a quien quiera realmente entregarle su oscuridad a mis demonios.

Pero también me volví a sentir insegura, también pude recordar lo pésimo que se siente que jueguen con lo que siento. Volví a sentirme inservible. Para luego volver a levantar la cabeza y entender nuevamente que todo pasa por algo y que gracias a ello hoy soy más fuerte.

Sé que puedo lograr más, que puedo llegar a conocer cada rincón que hay en mi. Sé que puedo hacer y deshacer. Solo necesito darme oportunidades para continuar y no tener la necesidad de cohibirme de errar y ¿porque no? caer en el intento, caer y sentarme - sin apuro -, porque la unica condición que me a puesto la vida a la hora de caer es levantarme. Quiero una cancion que vaya acorde con mis letras y tonos. Quiero poder equivocarme y volver a tomar sentido. Quiero poder disfrutar y expresar cada parte de mi. Quiero poder bailar a mi ritmo y que la vida no se empeñe en cambiarme los pasos, ir al compas del amor y sentir cada detalle de lo que el destino tiene preparado para mi. Dejar de ser tan inocente a la hora de escribir sobre mis sentidos. Quiero poder sostener unas manos que no resbalen ante dudas si no que se agarren con más fuerzas ante adversidades.

Ahora lo único que quiero es hacer las cosas bien y que nadie me detenga.